La formación académica es excelente pero aún mejor es la calidad de principios y valores que fomentan en los niños y jóvenes para el presente y el futuro.
El GLP ha llenado las expectativas que buscábamos para la educación de nuestros hijos; está basada en valores, tanto académicos como morales, se evidencia la responsabilidad, el compromiso de los docentes, su preparación como formadores de la nueva generación.