Doy gracias a Dios; por el Gimnasio Campestre Beth Shalom. Es una bendición trabajar y ser madre de familia de este lugar. Casa de Paz. Felicitaciones por sus logros.
Su proyecto pedagógico institucional no es congruente con las acciones y sanciones que impone la dueña, secundadas por la rectora y el resto de personal directivo. Esta institución solo trabaja por el dinero y le importa muy poco el bienestar y salud de los estudiantes. Este lugar perdió hace mucho